El contraer matrimonio es una decisión bastante seria y trascendental, puesto que trata de compartir el resto de tu vida con la persona que amas, y juntos lograr sus metas en equipo como las personales, así que es completamente entendible que tengas miedo o dudas si la persona con la que ahora estás sea la correcta para unir tu vida. Pero queremos darte algunas ideas para que tu misma te des cuenta si tu novio es el correcto o no para que compartas toda tu vida con él y formen una familia.
Comparten los mismos valores
Aunque parece algo que no tiene mucha trascendencia, te digo que es todo lo contrario, sabemos que no serán igual en todo, y que tendrán muchas diferencias, pero compartir los mismos valores es fundamental para un buen matrimonio, valores como el respeto, la empatía, La paciencia y la gratitud debe tener tu pareja si es que tú los tienes a esto agrégale que tienen que saber si tendrán hijos y cómo serán educados, si comparten la misma religión, las mismas normas etc. son detalles que puedes platicar o darte cuenta antes de dar el Sí en el altar.
Sus discusiones no son seguidas
La ciencia está de acuerdo en que las pelas de vez en cuando son sanas, porque son un reflejo de comunicación en la pareja, puesto que no son iguales y en alguna ocasión llegarán a tener diferentes puntos de vista, pero cuando estás “peleas” rebasan el límite del respeto y tolerancia, tienen conflictos por el mismo motivo siempre y nunca llegan a una solución sana. Sus peleas son por celos y desconfianza; si este es el caso, créeme que lo mejor será que te replantees el casarte con esa persona.
La independencia es fundamental
El ser codependiente de tu pareja o viceversa es algo completamente insano, puesto que para que una relación fluya con libertad se necesita ser independiente en todas las áreas, financiera, emocional y también física, solo así podrán realmente complementarse y cuando algo comience a salir de control tengan la libertad de decir “hasta aquí” de otra manera, si son codependientes en alguna de las áreas antes mencionada, entonces puede volverse una relación tóxica que no les traerá nada bueno.
Tienen una buena relación con sus familias
Si ambos conocen a sus familias y tienen una relación sana con ellas, entonces estoy segura de que se aproxima un matrimonio sano, cuando se acercan los conflictos la familia es la que está para apoyarlos, así que una buena relación con sus padres y hermanos puede ser la diferencia en su matrimonio.
Se alegra por tus logros
Se alegra por tus logros y hasta los presume con los demás, te apoya incondicionalmente para que sigas cumpliendo tus planes y proyectos, siempre te anima a que luches por lo que quieres y al igual que tú él tiene metas que con tu apoyo va cumpliendo.
Le gusta que tengas amigos
Si son buenas amistades, el mismo te anima a que salgas con ellas para que te salgas por un momento de la rutina, no te aleja de las personas que amas, sino, por el contrario, te da esa libertad para que tengas tiempo con ellos.
Ambos son honestos
Tienes la libertad y confianza de decir las cosas que te desagradan sin temor a su reacción, pues en ambos permanece el respeto, aún a pesar de que la situación no sea tan buena. No te oculta nada, pues tiene la confianza de contarte absolutamente todo.
Son los mejores amigos
Más que una relación de noviazgo, deben ser amigos, cómplices y disfrutar de la compañía el uno del otro, tener momentos de diversión y más, esa es la magia en cualquier relación matrimonial.
Con estos consejos esperamos haber despejado tus dudas, y esperamos que tomes la mejor decisión.
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